El coaching es un entrenamiento. Cuando decides iniciar un proceso de coaching, un entrenamiento, generas un importante cambio en ti y en tu entorno, para ello necesitas estar preparado; es de suma importancia desarrollar tu potencial mental, emocional , físico y espiritual para conseguir tus metas y sacar lo mejor de ti.
TU MENTE: ¿Qué eliges pensar? ¿Qué eliges creer? Conviertes tus pensamientos y creencias en los generadores del cambio que deseas hacer. Porque ellos son los precursores del presente y futuro que quieres vivir y hacer realidad. Los transformas en los perfectos aliados para que tus sueños, objetivos y metas sean un hecho.
TUS EMOCIONES: descubres como la gestión de tus emociones, puede potenciar o limitar tu vida. Estudias tus emociones, para que se conviertan en una herramienta que trabaje a tu favor en la consecución de tus metas.
TU CUERPO: toda acción y todo cambio requiere un gran esfuerzo; esfuerzo no solo mental y emocional sino también físico. Es vital desarrollar toda tu fuerza y energía. Es vital que te des a ti mismo el Amor, respeto y aceptación que tu cuerpo merece.
TU ESPíRITU: eres integración, eres un todo y todo está conectado. Y si vivencias esta sincronía:
Entonces la dirección es elegida conscientemente, en base a los valores que son brújula y norte en tu camino vital. Cuerpo, mente, emociones y espíritu van en la misma dirección. Y es en este instante en el que la percepción de tu realidad cambia, el proyecto vital elegido se vive y se disfruta y todo tú y tu entorno se eleva y trasciende.
El proceso de coaching: Como norma general suele estructurarse en unas 8-12 sesiones, de una hora y cuarto, las cuatro primeras semanalmente y el resto quincenales. Estas sesiones pueden ser presenciales, por teléfono o por cualquier sistema de videoconferencia. Lo fundamental es que la relación se desarrolle en un entorno adecuado, donde el cliente se sienta cómodo y no sufra interrupciones durante las mismas.
Desde el primer momento tomas conciencia de qué es lo que quieres y te responsabilizas y comprometes contigo mismo en hacer realidad tus sueños más deseados, en alcanzar tus objetivos.